¡Hola! Luego de unas cuantas semanas de vacaciones, estoy por aquí nuevamente. 😄
En Argentina* falta poco para que comience el ciclo lectivo, así que tenía ganas de compartir con ustedes esta entrada sobre el Período de Inicio en Jardín. A continuación encontrarán el concepto y ciertas particularidades del rol del acompañante. Ojalá estas claves, colaboren en el proceso. 😉
*Aclaro el país porque para mi sorpresa, el blog tiene visitas desde varios otros. ¡Qué alegría! ¡Bienvenidos! 💖
El inicio de la escolaridad, es un momento muy movilizante para mamás y papás. ¡Se toma dimensión de cuánto crecieron!
Los nenes y nenas comienzan una nueva etapa donde irán construyendo SU pequeño mundo, participando de una experiencia diferente a la familiar: Harán amigos propios (que no necesariamente serán hijos de los amigos de papá y mamá), tendrán otros adultos de referencia, realizarán nuevas actividades, conocerán algunas de las reglas que requiere la convivencia en armonía con personas distintas, aparecerán algunos conflictos y desafíos por resolver… Sucede mucho en el Jardín (¡muchísimo!) y cada situación que vivencian los nenes y las nenas, tiene su correspondencia con otra de la vida adulta. La escuela es como una mini-sociedad.
Y el primero de los aspectos que generará confianza, será la elección de la institución.
Es bueno tener referencias reales del lugar donde hijos e hijas, pasarán un porcentaje importante de su infancia.
Además de googlear, podemos preguntar opiniones por el barrio, a otras mamás y papás que cruzamos en la plaza, a los vecinos... Personas de verdad que nos cuenten sus experiencias.
Y no solamente privilegiar cercanía o comodidad, también hay que indagar en el proyecto pedagógico. Esto incluye el concepto de niñez de la institución, su escala de valores, lo que privilegia, la forma de trabajo en las salas, la participación de las familias, la estabilidad del plantel docente, las oportunidades que brinda, el tipo de salidas didácticas que realiza, los festejos y eventos que propone…
Dichos aspectos no son "detalles menores"… De ese combo se desprende el modo en que la institución tratará a los nenes y nenas y el recorte de contenidos que realice, será una visión particular del mundo que enmarcará sus vidas diarias.
La familia es SIEMPRE la educadora por excelencia, pero estarán varias horas en el Jardín y lo que suceda allí, también dejará huella. (La infancia es una sola.)
Luego de ese trabajo detectivesco, de optar por una institución y conseguir vacante (ojo que ese punto a veces es complicado)… cuando tenemos EL Jardín, con marzo se inaugura el Período de Inicio.
El Período de Inicio tiene como objetivo que los nenes y nenas establezcan vínculo con su maestra y conozcan los ritmos del Jardín para sentirse confiados y permanecer durante las jornadas tranquilos y entusiasmados.
No abarca una cantidad de días exacta, pero se extiende un par de semanas y en general, se organiza de modo que el tiempo de permanencia de los nenes y nenas se vaya incrementando paulatinamente, hasta lograr completar la jornada. Es decir, cada día se quedan en el Jardín un ratito más.
Así mismo, las primeras actividades suelen ser compartidas con un adulto acompañante y poco a poco, mientras el nene o la nena va conociendo a su maestra y se anima a participar de las propuestas, ese adulto se irá alejando físicamente: dentro de la sala al lado, en la sala pero más alejado, afuera de la sala, en el patio, en el hall, hasta lograr despedirlo en la vereda.
Es importante aclarar que no todos los nenes y nenas, compañeros de Sala, siguen la misma planificación… Durante las primeras semanas sí pero después, la maestra y los acompañantes irán evaluando lo más adecuado para cada uno y la manera armoniosa de brindarle la seguridad que necesita.
En esta descripción del Período de Inicio queda en evidencia que el acompañamiento y respaldo familiar en este proceso, es fundamental. Veamos, entonces, tres puntos que podemos tener en cuenta…
ACOMPAÑANTE DESIGNADO
Para algunos, el Jardín, es la primera experiencia de despegue y hay nenes y nenas que se muestran sensibles a este tipo de cambios. Por eso, si bien todo el núcleo familiar estará conteniendo, se recomienda que sea una sola la persona que acompañe con su presencia física este proceso. Una misma persona que cada día lo lleva, permanece si es necesario y lo va a buscar.
Seguir una rutina desde casa, les brindará serenidad en medio de tantos aspectos nuevos que tienen que procesar.
Cuando se va rotando de acompañante, surge sensación de inestabilidad y por ejemplo, a veces sucede, que expresan disgusto cuando acude a retirarlo alguien que no es quien ellos esperaban y no porque no quieran a esa persona, sino porque venían siguiendo un esquema que se quebró. Mejor no darles sorpresas durante este período, al contrario, repetir las formas ayudará a que anticipen lo que va a suceder y puedan mantenerse tranquilos.
ACOMPAÑANTE CONSCIENTE DE SU FUNCIÓN…
…que el nene o la nena pueda empezar a establecer un vínculo afectivo con el nuevo adulto. Experimentando que existe alguien a quien acudir si tienen alguna necesidad, se animará a permanecer en el Jardín. Así que es importante evitar distraerlos para sacar fotos o intervenir o contestar por el nene o nena, cuando la maestra se está relacionando individualmente.
También es fundamental que no los expongamos si se muestran tímidos, ni los obliguemos a dar un beso si, por ejemplo, ya se animó a saludar con la mano… Cada acompañante conoce las características de la personalidad del nene o la nena, entonces celebrará cada avance con alegría, sin comparar el proceso con el de sus compañeros.
PUNTUALIDAD OBSESIVA TANTO AL INGRESAR COMO AL RETIRARSE
Las jornadas están pensadas con un tiempo destinado a recibir y saludar a los nenes y nenas. Por eso, no es lo mismo que alguien se sume cuando la propuesta ya comenzó. Verá que sus compañeros ya están participando de la actividad y se sentirá un poco desorientado… Como ya dijimos, es bueno ahorrarle cualquier sentimiento molesto.
Tampoco es agradable para el nene o nena, estar listo para retirarse y tener que sentarse a esperar que lo vengan a buscar. Esos minutos, para ellos son eternos.
Hasta que el nene o la nena conozca los ritmos del Jardín y adquiera seguridad, tenemos que estar disponibles a horario.
El Período de Inicio habitualmente finaliza con una reunión de padres donde las maestras cuentan algunas características de la Sala, anticipan el trabajo del año y les entregan a las familias un informe escrito que describe las particularidades del proceso de su nene o nena.
Y más allá de estas cuestiones que comentamos que se pueden atender, tenemos que saber que a veces, y hagamos lo que hagamos, el Período de Inicio se torna un poco "turbulento". Es esperable que haya nenes y nenas que lloren, se resistan, se muestren enojados, tengan mucho miedo (algunos papás y mamás también)... pero como todo, pasa. En algún momento se resuelve, se conquista... se termina.
Ojalá disfruten de estos días... Son incontables las satisfacciones que los esperan. El Jardín suele ser un lugar muy feliz. 😉
¡Gracias por pasar por aquí! ¡Hasta pronto!
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Si quien comienza el Jardín es un bebé, en esta entrada hay 8 puntos específicos para acompañarlos. 💕👶
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